La idea de levantar el monumento surgió en 1972 gracias a Donald J. Guilfoil. Este detective sumó los apoyos necesarios para iniciar el proyecto. La legislación para autorizar el monumento se promulgó en octubre de 1984. Luego se tuvo que encontrar la ubicación ideal para el memorial; y también se tuvo que buscar la financiación necesaria para su construcción.
El monumento se inauguró de manera oficial el 15 de octubre de 1991. En ese momento, los nombres de más de 12.000 oficiales caídos estaban grabados en las paredes del memorial. En la actualidad la cifra rebasa los 21.000 nombres que, por desgracia, aumentan cada año. Todos los años se celebra una vigilia a la luz de las velas para dedicar formalmente los nombres añadidos a las paredes.
El memorial lo diseñó el arquitecto Davis Buckley. Presenta una piscina reflectante rodeada de pasarelas en un parque de 12.000 metros cuadrados. El monumento mantiene un Centro de Visitantes y una tienda. Allí los visitantes pueden examinar diversos objetos; y también aprender más sobre la historia de los oficiales caídos cuyos nombres están grabados en las paredes.
Finalmente, hay que aclarar que el memorial se mantiene con fondos privados, no con dinero de los contribuyentes. Esto es así a pesar de que se encuentra en terrenos federales.
Cómo llegar al National Law Enforcement Officers Memorial
La línea roja de metro para en Judiciary Square, que está justo bajo el memorial. Si preferimos usar el autobús, la línea D6 para en uno de los extremos de la plaza donde está el memorial. Las líneas 80, P6 y X2 paran dos calles más al norte, a unos minutos a pie.